El artículo 1434 del Código Civil francés, en su redacción dada por la Ley nº 85-1372 de 23 de diciembre de 1985 – art. 16 JORF de 26 de diciembre de 1985, vigente desde el 1 de julio de 1986, dispone que:
“Se considerará que se ha realizado inversión o reinversión en relación con un cónyuge en cualquier caso en que, en el marco de una adquisición, se hubiese declarado que ésta se efectuó con cantidades de dinero propias o procedentes de la enajenación de un bien propio, y en concepto de inversión o reinversión de los mismos. En ausencia de dicha declaración en la escritura, la inversión o reinversión tan sólo podrán producirse de mutuo acuerdo entre los cónyuges, y tan sólo surtirán efecto en el marco de sus relaciones recíprocas”.
Es conveniente interpretarlo de la siguiente manera:
- La declaración de privacidad realizada de forma unilateral por el cónyuge comprador en el momento de la adquisición, será oponible a cualquier persona. Sin embargo, si el cónyuge no comprador no ratifica de inmediato dicha declaración, dispondrá de la facultad de oposición aportando a posteriori la prueba contraria.
- Cuando el cónyuge comprador olvide realizar la declaración de privacidad en el momento de la adquisición, éste perderá la posibilidad de invocarla a posteriori (ver, en este sentido, la sentencia del Tribunal Supremo francés de 27/02/2013); en cambio, el cónyuge no comprador podrá, en este caso, reconocer a posteriori el carácter privativo, pero dicho reconocimiento sólo será oponible a éste último y no con respecto a terceros.
- La confesión de privatividad por parte de los cónyuges en el momento de la adquisición será válida y oponible a cualquier persona.